Desde mi Punto de Vista por Hugo Fernando DURAN
EL REGRESO DE LOS DINOSAURIOS AL PODER
A pesar de que los mexicanos en el exterior no tienen derecho al voto en las llamadas elecciones intermedias, en las que se renueva la Cámara de Diputados, no dejan de estar al pendiente de lo que pasa en México, como ocurre en el Metroplex, donde algunos andan jubilosos por el triunfo de los ahora llamados “rojos” (como los rabanos: rojos por fuera, pero blancos por dentro) del PRI.
Luis de la Garza, Gonzalo Hidalgo y Pedro Villa, conocidos activistas del Metroplex (ya saben que todos son líderes o activistas) quienes jamas han negado ser priistas de corazón, aún están de fies-ta por el aplastante triunfo que registró este 5 de julio el Partido Revolucionario Institucional, que prácticamente arrasó en las urnas y casi se llevó el “carro completo”, con la mayoría en el Congreso y sólo le faltó Sonora, donde el problema de la Guardería ABC fue clave para que Acción Nacional (PAN) se quedara con esa gubernatura y por muy escaso margen.
De la Garza, quien ha formado parte del Comité Ejecutivo Nacional del PRI, es de los más contentos porque ha sido con los gobernadores priístas, con los que mejores negocios ha realizado desde que era propietario del Canal 44 de televisión “Teleamérica”. Hoy en dia, el “Yo-yo” De la Garza, es propietario del Periódico “Consentido” y dice ser dueño del canal 61.3 de TV-Digital con repetidoras en varios estados de la República Mexicana, por lo que ya se está frotando las manos de gusto.
Gonzalo Hidalgo, uno de los personajes más reconocidos en Dallas y en todo el norte de Texas por su defensa a los migrantes, también está contento con el triunfo del PRI, porque desde hace muchos años ha participado en los diversos gobiernos priístas del estado de Chihuahua, actualmente con su amigo Jose Reyes Baeza, fue fundador de Casa Chihuahua y es responsable del Programa de Atencion a Migrantes por parte del Consejo Nacional de Población del Estado.
Hay que destacar que el triunfo del PRI ya se veía venir, luego de un sexenio perdido con Vicente Fox Quezada y de la división que ha surgido en el Partido de la Revolución Democrática PRD, donde Andrés Manuel López Obrador ha dejado de ser el guía espiritual y moral de la organizacion, para darle renovados ánimos al Partido del Trabajo.
Vicente Fox quien ha sido el presidente más ignorante que ha tenido México, dejó muy mal parado al Partido Acción Nacional, incluso Felipe Calderón no era su gallo a la presidencia, sino Santiago Creel, jamás lo ha negado y si el PAN no perdió la presidencia en el 2006 fue porque hubo mano negra, así lo piensa todo la gente, si usted le suma la crisis económica que pasa México y la baja del poder adquisitivo de la población, era lógico que los votantes buscaran otra alternativa.
Sin embargo, el triunfo del PRI significa el regreso de los dinosaurios al poder, de esos políticos ya curtidos, que han estado durante años al frente de las secretarías de gobierno, tales como Emilio Gamboa Patrón, quien se inició como secretario particular del ex-presidente Miguel De la Madrid; como Manlio Fabio Beltrones, ex-senador y luego gobernador de Sonora; Beatriz Paredes, ex gobernadora de Tlaxcala de 1988-1994; Francisco Labastida Ochoa ex gobernador de Sinaloa y ex candidato presidencial en el 2000; y Jaime Serra Puche, ex secretario de Comercio e impulsor del Tratado de Libre Comercio Mexico-Estados Unidos, entre otros.
La gente tiene confianza en estos políticos porque ya los conoce y espera que postulen a Enrique Peña Nieto como su candidato a la Presidencia de la República, porque es un joven brillante que ha impulsado el desarrollo integral en el estado de México y puede hacer mucho por esa gran nación.
Finalmente en una celebracion de amigos realizada hace 10 años, el entonces Cónsul de México en Dallas, Luis Ortiz Monasterio, decía abiertamente y con confianza que “los mexicanos somos priístas de corazón, hemos vivido 70 años bajo gobiernos del tricolor y nos gusta; por eso Vicente Fox está frito y no llegará a la presidencia”. Incluso en la visita que hizo Fox a Dallas como aspirante del PAN, ni siquiera fue a recibirlo, por ello en cuanto Fox tomó el poder, lo removió y lo mandó de embajador a Colombia y luego a Irak, al inicio de la guerra y, por ahora, me despido diciendo . . . hasta la próxima.