<!--:es-->Henderson y Rice, inmortales
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Henderson y Rice, inmortales . . . Generación 2009 del Salón de la Fama

COOPERSTOWN, Nueva York – Rickey Henderson sabía lo que se esperaba de él cada vez que bateaba. Y Jim Rice también.

Por su parte, Rice dijo: “Créanme, no me pagaban para recibir bases por bolas. Me pagaban para intentar hacerle algún daño (al equipo contrario)”. Los dos peloteros _Henderson, el arquetípico primer bate con una sonrisa contagiosa, y Rice, el consumado bateador de poder con una mirada de hielo_ infligieron más daño a sus rivales de lo que se esperaba de ellos, y serán debidamente reconocidos el domingo por los considerables logros en sus carreras cuando sean admitidos al Salón de la Fama del Béisbol.

Serán los primeros que ingresan cuya posición en el campo fue principalmente la de jardinero izquierdo desde que Carl Yastrzemski de Boston entró al Salón en 1989.

Miembro de nueve equipos durante su carrera de 25 años, logró más que la mayoría de los peloteros. Tiene el récord histórico de más bases robadas en una temporada (130) y en su carrera (1.406), de anotaciones (2.295) y de abrir un partido con un jonrón (81).

Henderson fue seleccionado por los Atléticos de Oakland en la cuarta ronda del draft de 1976. Tras destacarse en las ligas menores durante tres temporadas, debutó con Oakland en las Grandes Ligas a fines de junio de 1979.

Con su velocidad estableció el récord de robos de base en la Liga Americana en una temporada al registrar 100 apenas en su segundo año, uniéndose a Maury Wills y a Lou Brock como los únicos jugadores en la historia de las mayores en robar 100 o más bases en una campaña. Henderson obtuvo ganancias en el plato al agacharse mucho para batear, con lo cual reducía dramáticamente su zona de strike y confundía a los pitchers como ningún otro jugador. “Rickey hacía que fuera simplemente imposible no distraerse con él”, dijo Tony La Russa, que fue mánager de Henderson en Oakland y le temía cuando éste estaba en el equipo rival.

Apenas el 44° pelotero en ser elegido para ingresar al Salón de la Fama en el primer año en que ya podía ser sometido a votación, Henderson se retiró con 2.190 bases por bolas en su carrera (128 más que Babe Ruth), y aunque Barry Bonds ya ha superado ese total, Henderson aún tiene el récord de más pasaportes no intencionales con 2.129.

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