<!--:es-->La transformación de una cocina
. . . Un nuevo salpicadero y mesón<!--:-->

La transformación de una cocina . . . Un nuevo salpicadero y mesón

El equipo de Casa Al Día nos presentó en la capítulo 11 la forma de cómo sustituir un salpicadero y mesón en la cocina sin la necesidad de tener que demoler. Fue una tarea un poco laboriosa, sin embargo el equipo liderado por el director de proyectos Manuel Zamudio y la conductora CC Limardo, lograron una increíble transformación invirtiendo poco dinero.

Elegancia ante todo

Manuel explicó que la cocina era una muy bonita con delicados acabados en madera, pero que el salpicadero y el mesón no iban acorde con la decoración del lugar. “El reto aquí es no teníamos presupuesto para poner granito duro o mármol en una sola placa, entonces lo que hicimos fue revestir el mesón viejo con mármol travestido”.

Lo primero que se hizo fue desarmar el platero, la tubería de agua y desplazar algunos muebles como la nevera. Después se agregó una placa de un cuarto de pulgada sobre el tope para poder ponerle travertinas de mármol, dándole un toque de diseño rustico.

La losa se tuvo que colocar una por una, empezando de la mitad a la izquierda y luego hacía la derecha para que de esta manera todo quedara más homogéneo. Luego se tuvieron que cortar cada uno de los bordes. “Muchas veces se puede utilizar bordes en mármol, que llevan por nombre ‘bordes de nariz’, aunque estos son más costosos, para evitar invertir más se utilizaron las mismas losas y sólo se cortaron en tres partes iguales de dos pulgadas, se hicieron alrededor de 150 piezas y se pegaron todas”, explicó Zamudio.

En lo que secaban, los expertos decidieron darle un poco de color al lugar por lo pintaron las paredes en tono ‘macadamia’ y chocolate. La pintura sólo se aplicó enfrente de la barra y la parte donde se encontraba el gabinete.

Una vez que se terminó de pintar y el cemento secó por completo, se aplicó un sellador a cada una de las losas en el salpicadero y en el mesón. Despues se volvió a colocar los muebles como el fregadero y la nevera, además de que se armaron los grifos y se hizo una limpieza total con un abrasivo.”Con tan sólo $1, 600 pudimos darle un aspecto totalmente diferente a esta cocina, dotándola de mucha elegancia”, concluyó Zamudio.

Para concluir en “El minuto Handy” Manuel nos aconsejó una forma sencilla de cómo remover el tape azul que ponemos para no pintar los bordes, molduras, paredes, etc…Lo que hizo fue simplemente usar una cuchilla haciendo cortes en la orilla de la pintura.

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