
Una Bomba de Tiempo en México!
CIUDAD DE MÉXICO – La fuerte disputa por la presidencia de México mantiene en vilo a millones de mexicanos que esperan una pronta resolución. Sin embargo, sea quien sea el ganador, el nuevo mandatario tendrá que enfrentarse a un panorama complejo, donde la pobreza y la inseguridad, traducidas en ingobernabilidad, son algunos de los problemas que más alertan a la población, coincidieron intelectuales y analistas entrevistados por Univision Online.
En una semana de batalla electoral histórica (y a veces histérica), después de las recientes declaraciones de Luis Carlos Ugalde, el presidente del Instituto Federal Electoral (IFE), sobre los tres millones de boletas que al parecer no han sido contabilizadas, se agrega la exigencia de la izquierda para que sean nuevamente contados todos los sufragios.
Los resultados preliminares de la autoridad electoral dieron la victoria a Felipe Calderón Hinojosa con un diferencial de más de 200 mil votos, según la última información, sobre el candidato izquierdista Andrés Manuel López Obrador de la Alianza por el Bien de Todos (Partido de la Revolución Democrática, Partido del Trabajo y Convergencia -PRD-).
“Me preocupan los resultados por que cada vez observo mayor estrechez en cuanto a diferencia de los dos punteros de la justa”, explicó Rafael Loret de Mola, escritor, periodista y analista político.
Pero el problema no es quién termine siendo el presidente, sino el contexto económico, político y social por el que atraviesa México. Es ahí donde tendrán que demostrar que la campaña se quedó atrás y es hora de poner las propuestas en acción, aseguran los expertos consultados.
“Pobreza, delincuencia, analfabetismo, inseguridad… Todo esto se debe fundamentalmente a que en la administración del presidente [Vicente] Fox se vio una profunda ausencia de gobierno, un abismo de poder y es preocupante, porque la continuidad indica que a lo que se le va a dar prioridad es al manejo de la estructura política”, dice Loret de Mola.
Por eso el mandato del próximo presidente de México enfrenta un serio problema de ingobernabilidad; los expertos coinciden en que hay una imposibilidad de garantizarla a corto plazo.
“Como está dada la estructura nacional, hay más candados contra la gobernabilidad que posibilidades de abrirlos, es necesaria una reforma estructural del estado, que permitiera trasladarnos del viejo esquema del presidencialismo autoritario, que no se ha extinguido porque hay pruebas evidentes de la intervención del Ejecutivo federal, la única forma de darle gobernabilidad a México es haciendo este cambio estructural definitivo”, enfatiza el periodista.
Los resultados electorales del IFE arrojan que nadie tendrá una mayoría operable de Diputados y de Senadores. Acción Nacional logró alrededor del 33 por ciento sobre el 29 por ciento de la Alianza por el Bien de Todos y el 27 por ciento de la Alianza por México (Partido Revolucionario Institucional y Verde Ecologista de México).
“Habrá una necesidad de negociación de establecer alianzas políticas desde ahora para superar protestas, no se podrá modificar ninguna ley si no hay alianzas. Se tiene que manejar una agenda legislativa que traduzca el plan y las decisiones del nuevo gobierno. El Congreso que hemos elegido es el más fragmentado de nuestra historia”, comenta Federico Estévez, maestro en ciencia política y estudios latinoamericanos de la Universidad de California, Los Ángeles (UCLA).
Loret de Mola coincide en que se requerirá de una serie de negociaciones con el partido de oposición, ya que si no se hace, los resultados serían desastrosos.
“Se dejarán otra vez marginados y descuidados los conflictos nacionales como la violencia, la desigualdad social, la inseguridad publica, el avance claro de los carteles del narcotráfico, que obviamente desde el inicio de la campaña electoral pusieron muy altos sus tendones de corrupción y violencia”, argumenta Loret de Mola.