
Barras Bravas son el cáncer del futbol!
El torneo argentino tocó fondo y se mueve en una zona caótica, fecha tras fecha los anormales vestidos de hinchas o barras bravas atormentan el certamen y amenazan con su violencia a futbolistas, técnicos, árbitros, policias y también a los buenos hinchas, lastimosa imagen de un fútbol legendario que no merece caer tan bajo.
En el clásico entre Independiente y Racing, cuando el partido estaba a favor del Rojo por 2-0, a los 19 minutos de la segunda etapa, el árbitro internacional Horacio Elizondo dijo no va más, ocurre que hinchas retrógados de Racing, frustrados por la caída de su equipo, empezaron a arrojar piedras a los policías y se mostraron incontrolables, imágenes que dieron la vuelta al mundo gracias a la televisión.
Ahí no terminó la cosa, el fiscal Marcelo Romero tomó declaración a seis jugadores de Gimnasia y Esgrima de la Plata, entre ellos a Ariel Franco, quien el jueves 8 de noviembre pasado dejó entrever que los jugadores habían sido amenazados para que perdieran ante Boca Juniors (4-1) para perjudicar a Estudiantes, su máximo rival.
El fiscal dijo que está comprobada “una reunión” entre las partes, aunque todavía no pudo determinar la existencia de intimidaciones, sin embargo un grupo de hinchas de Gimnasia amenazaron a periodistas de la revista Ole por dar a conocer la noticia de las amenazas.
Lo cierto es que otra vez una fecha del certamen argentino no pudo ser terminada y por ahora nada ni nadie logra frenar los ataques y atrocidades de estos elementos repulsivos.
“Somos los únicos en el mundo que tenemos desde finales de los años 50 una violencia futbolera organizada, patrocinada y financiada desde arriba (dirigencial)”, dijo hace algún tiempo el escritor e investigador Amílcar Romero. El cómputo de víctimas mortales vinculadas al fútbol desde 1939 en el país se ubica entre 180 y 240, según distintas fuentes e historiadores.
Romero, autor de varios libros sobre los casos de muerte en el fútbol, dijo que “los fenómenos sociales no se engendran del día a la noche ni son consecuencia de la eclosión espectacular de media docena de hechos aislados”.
El analista dijo que a través de los años “se ha sofisticado el rol de los ‘barras bravas’ (grupos violentos)”, que “tienen contactos con los dirigentes, manejan grandes sumas de dinero y se comunican mediante teléfonos celulares”.
El vice descartó de plano que la pobreza y marginalidad, que se triplicaron en el país tras la gran crisis de 2001 (económica y política), puedan ser el origen de la formación de las ‘barras bravas’. Romero coincidió al afirmar que “la gente pobre no es asesina”.
Luis Isuardi, profesor de filosofía de la privada Universidad de Belgrano y estudioso de la rama deportiva, ofreció otro enfoque sobre el fenómeno al indicar que “la educación no puede domesticar ni controlar a la pasión”. “La pasión es parte de lo humano y no se somete a reglas. Por eso fallan los sistemas de seguridad y represión”, dijo.