<!--:es-->Consejos para que tu Hijo aprenda lo que 
estudia: Logremos que se Concentre<!--:-->

Consejos para que tu Hijo aprenda lo que estudia: Logremos que se Concentre

Televisión, juguetes, amigos, computadoras, …con tanta distracción ¿quién es capaz de estudiar y de retener lo que dice un papel de la escuela? Pues tu hijo puede concentrarse y ser un excelente alumno. Aquí te decimos cómo ayudarlo.

Ni música ni televisión

Aunque la mayoría de los chicos aseguren que pueden estudiar con la televisión encendida, no les creas. El primer paso para que tu hijo retenga lo que le enseñan en el colegio es que lo vuelva a leer en un ambiente tranquilo, sin distracciones ni estímulos que lo saquen de foco.

“A los padres se les suele decir que los chicos tienen que estudiar en un ambiente tranquilo, pero muchas veces no hacen caso a esta recomendación obvia”, señala Carolyn Kaufman, doctora en psicología y profesora.

Es que la quietud tiene una explicación, dice Kaufman. El cerebro procesa toda la información nueva junto con el contexto en el que ésta nos llega. Si vemos algo nuevo en clase, debemos refrescarlo en un ambiente parecido al curso. “Sentarse en una mesa sin televisión ni música está mucho más cerca de un curso que estar en el piso comiendo patatas fritas y mirando televisión”, asegura.

“No importa si tu hijo insiste con que puede estudiar con ruido, lo mejor es que le procures una atmósfera silenciosa”, asegura Silvana Clark, especialista en educación y autora de diez libros para padres. “Hay que explicar esto a los niños y ponerles un lapso de tiempo, por ejemplo, veinte minutos sin música ni televisión”.

Clark asegura que los chicos deben entender que esta rutina es parte de la vida, como comer y jugar. No hace falta que sea una tortura: tú puedes poner buena actitud, comprarle colores divertidos para que marque partes importantes de lo que lee y hacerle un decorado para el rincón en el que él desempeñará sus tareas.

Pero para aplicar todo esto, el orden es fundamental: de nada sirve que tu hijo haga las tareas a cualquier hora y en cualquier parte. Debe tener una rutina marcada. “Los chicos, como los adultos, tienen una tendencia a distraerse”, dice Kaufman. Para ayudarlos, dice la experta, es importante que primero nos disciplinemos nosotros y seamos un modelo de buenos hábitos.

Por ejemplo, puedes limpiar siempre a la misma hora, o sentarte en silencio con él a revisar cuentas o a leer en un momento determinado del día. Así aprenderán que existe un horario para las obligaciones….y que luego serán libres de jugar a lo que quieran. Recuerda que el caos es tu peor enemigo.

Diez Consejos

que Ayudan!

Así que ya sabes: está en tus manos ayudar a tu hijo con disciplinas que le durarán toda la vida, que le servirán para la universidad y que le serán útiles cuando encuentre un trabajo. Empieza ya mismo a aplicar estos pasos que mejorarán su concentración:

Intenta estar a su lado.

Los chicos necesitan la guía de los padres para hacer las tareas, dice la experta Silvana Clark. Tienes que procurar estar cerca de ellos para ayudarlos en sus dudas. “Yo plancho al lado de mi hija mientras estudia y ella me puede hacer preguntas, o yo pedirle que me lea las lecciones en voz alta. Este es un recurso efectivo”, dice Clark.

Que haga sesiones

cortas todos los días.

“La concentración disminuye luego de quince minutos”, explica Carolyn Kaufman. No tiene sentido que obligues a tu hijo a estar sentado dos horas cuando se le acumulan tareas. Lo mejor es que se siente todos los días en dos sesiones de quince minutos.

Dale metas y objetivos.

La psicóloga Virginia Shiller dice que poner metas ayuda a que tus hijos tengan ganas de acabar la tarea. Por ejemplo, diles que podrán ver televisión cuando terminen todo, y no dejes que la enciendan hasta que lo hayan hecho. “hay que ponerles metas pequeñas”, dice Shiller. No exigirles que saquen una A, pero sí que pasen un examen o que termine una lección.

Hazle entender que la vida tiene obligaciones.

Si tú haces las tuyas con mala cara, le darás el ejemplo. Tiene que incorporar el estudio como parte de su día a día y no tomarlo como una tortura.

Cuida el entorno.

No dejes que tu hijo estudie con música o con televisión, ni permitas que a esa hora vengan amigos (es solo media hora). Por más que el te diga que puede, estos estímulos conspiran contra la concentración.

Enséñale a hacer

cuadros sinópticos.

Anotar en otro papel lo que va estudiando a modo de resumen le ayudará a retener. Cómprale colores para que marque y aliéntalo a que realice estos cuadros.

Pon rutinas.

El caos es enemigo de la concentración. Debes poner una rutina diaria, y si es posible, seguirla tú. Cuando él regresa de la escuela y tú del trabajo, por ejemplo, pueden sentarse media hora y en silencio: tú haces tus tareas (cuentas pendientes o listas de compras) y él estudia a tu lado.

Aliméntalo bien.

Un chico que come poca vitamina y mucha chatarra no tiene las proteínas necesarias para retener lo que estudia. Un buen desayuno es fundamental para que entienda las consignas que le dan en la escuela

No lo presiones.

Cuando empiezas a establecer una rutina debes hacerlo con calma. Puede que el primer mes te cueste. Si lo presionas, relacionará el estudio con algo malo.

No dejes que repita

como loro.

No aprenderá nunca. Pídele que cuando termine cada lección te cuente de qué se trató como si fuera un cuento.

Share