Golpe a Tren de Aragua, Salvatruchas y Cárteles Mexicanos: EE.UU. los Declara Organizaciones Terroristas
En un movimiento sin precedentes, el gobierno de Estados Unidos ha anunciado la designación de nueve organizaciones criminales transnacionales como “organizaciones terroristas extranjeras” (FTO, por sus siglas en inglés). Esta decisión, firmada por el secretario de Estado Marco Rubio el 6 de febrero de 2025, entrará en vigor el 20 de febrero tras su publicación en el Registro Federal.
Entre los grupos designados se encuentran el Tren de Aragua, originario de Venezuela, la Mara Salvatrucha (MS-13) de El Salvador, y siete cárteles mexicanos de narcotráfico: el Cártel de Sinaloa, el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), Cárteles Unidos, el Cártel del Noreste (CDN), el Cártel del Golfo (CDG), y La Nueva Familia Michoacana (LNFM).
Esta clasificación implica sanciones más severas contra estas organizaciones y sus integrantes, incluyendo la prohibición de cualquier tipo de apoyo material, financiero o logístico. Además, permite a las agencias estadounidenses reforzar la cooperación internacional para perseguir a sus miembros y colaboradores.
La decisión marca un cambio significativo en la política de seguridad de Estados Unidos, ya que históricamente estas designaciones estaban dirigidas a grupos extremistas con motivaciones ideológicas o políticas. La medida podría generar tensiones diplomáticas con México, dado que varias de estas organizaciones operan dentro de su territorio.
El presidente Donald Trump, quien asumió el cargo en enero de 2025, ordenó a altos funcionarios preparar medidas para invocar una ley de 1798 que podría permitir la deportación de presuntos miembros de pandillas sin audiencias judiciales. Esta iniciativa podría reforzar la lucha contra estas organizaciones, pero también generar controversia en el ámbito de los derechos humanos y las relaciones internacionales.
La designación se basa en la sección 219 de la Ley de Inmigración y Nacionalidad, que establece los criterios para clasificar a una organización como terrorista extranjera. Según el documento oficial, “existe una base fáctica suficiente” para determinar que estos grupos criminales cumplen con dichos criterios.
Esta acción se alinea con la política del presidente Trump de arreciar su ofensiva contra grupos delictivos transnacionales. El 20 de enero, Trump firmó una orden ejecutiva que buscaba mayor presión contra estos grupos criminales, argumentando que son una “amenaza” para la seguridad nacional de Estados Unidos.
La medida ha generado reacciones diversas en la región. Venezuela, por ejemplo, ha manifestado su disposición para “retomar la cooperación penal con el gobierno de los EE.UU. para lograr la extradición de cualquier integrante venezolano de los grupos delictivos trasnacionales que cometen crímenes a lo largo del continente”.
Por su parte, El Salvador podría jugar un papel relevante en esta nueva estrategia. Durante una reciente visita del secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, a este país, se alcanzó un acuerdo para albergar en las cárceles salvadoreñas a “peligrosos criminales estadounidenses”, lo que también incluye a miembros de la MS-13 y el Tren de Aragua.
Esta designación representa un giro significativo en la política exterior y de seguridad de Estados Unidos, con implicaciones potencialmente profundas para las relaciones internacionales y la lucha contra el crimen organizado en el hemisferio occidental.