Inmigración, el tema de campaña 2008
WASHINGTON – La reforma migratoria quedó sepultada este año en medio de pugnas sobre cómo resolver la inmigración ilegal en Estados Unidos, pero el tema, sumado al creciente poder del voto hispano, será decisivo en los comicios de 2008, aseguraron expertos.
Guerra de posturas:
A un año de las elecciones generales, los aspirantes demócratas y republicanos a la presidencia se han enzarzado en un álgido debate sobre qué hacer con los doce millones de inmigrantes indocumentados que viven en los Estados Unidos.
En cada foro público, los argumentos suelen tener el mismo canto: los partidarios de la “mano dura” aseguran que los inmigrantes clandestinos son una carga pública y deben ser deportados, y quienes predican una solución “humana” responden que ellos contribuyen a la economía y merecen una vía para su legalización.
Como telón de fondo está, más visible que nunca, el creciente número de votantes hispanos que, según expertos consultados por Efe, podrían ayudar a definir al ganador en 2008.
El voto hispano:
“Sin duda, con los meros números podemos ver cómo ha crecido el voto latino desde 1992. Es un crecimiento nada desdeñable al que ningún partido puede hacer caso omiso”, dijo John Zogby, presidente de la empresa encuestadora Zogby International.
El voto hispano será decisivo en estados en disputa como Arizona, Colorado, Nuevo México, Florida y Nevada, vaticinó el encuestador.
Como prueba de ese crecimiento, Zogby señaló que en 1992, los hispanos conformaron el cuatro por ciento del total de 92 millones de estadounidenses que votaron ese año.
En 1996, fueron el cinco por ciento de 95 millones de votantes y, en 2000, fueron el seis por ciento de 105 millones de electores.