El sueño de tener casa propia sigue siendo una de las principales metas de los latinos en Estados Unidos. Sin embargo, para quienes trabajan por cuenta propia, ese camino viene con desafíos adicionales. Aun así, lejos de ser un obstáculo insuperable, la clave está en prepararse, entender las reglas del juego y aprovechar las oportunidades.
En el Mes de las Pequeñas Empresas, es fundamental hablar de este tema. Especialmente cuando los latinos representan el 36% de los nuevos negocios en EE.UU., la tasa más alta entre todos los grupos, según datos de NAHREP.
La independencia laboral abre puertas a la riqueza generacional, pero también exige una estrategia más cuidadosa al momento de solicitar una hipoteca.
El desafío de demostrar ingresos sin un salario tradicional
A diferencia de los empleados que reciben un cheque de pago fijo cada dos semanas, los trabajadores independientes deben esforzarse más para demostrar la estabilidad de sus ingresos.
Los prestadores —bancos, cooperativas de crédito, entidades hipotecarias— buscan ingresos estables y predecibles. Y para un emprendedor o freelancer, eso significa mostrar no solo cuánto gana, sino también la salud financiera de su negocio.
Documentos clave que debes tener en orden:
- Licencias estatales y comerciales que demuestren que tu negocio es real.
- Declaraciones de impuestos (últimos 2 años): personales y del negocio.
- Estados de pérdidas y ganancias actualizados.
- Balance general del negocio más reciente.
- Estados bancarios de los últimos 2 meses (personales y comerciales).
- Carta de un contador público (CPA) validando ingresos y estabilidad.
- Pruebas de ingresos adicionales (rentas, inversiones).
Estos documentos son tu mejor carta de presentación ante un prestador.
Cómo prepararte para comprar casa siendo autónomo
Aunque el proceso puede parecer más exigente, hay pasos concretos que pueden marcar la diferencia:
1. Cuida tu historial de crédito
Un puntaje alto es la primera señal de que sabes manejar tus finanzas. Monitorea tu crédito, paga a tiempo y corrige cualquier error en tu reporte.
2. Formaliza tu negocio
Registrar tu negocio, obtener las licencias correspondientes y mantener tu documentación al día da legitimidad a tus ingresos.
3. Controla tu deuda
Los prestadores miran con lupa tu relación deuda-ingresos. Lo ideal es que esté en o por debajo del 43%. Calcula sumando tus deudas mensuales (renta, préstamos, tarjetas) y dividiéndolas entre tus ingresos brutos.
4. Estabilidad ante todo
Demostrar al menos dos años de ingresos consistentes es clave. La constancia en tus ganancias será tu mejor aval.
5. Cuidado con las deducciones en impuestos
Es común que los trabajadores independientes deduzcan gastos para pagar menos impuestos, pero esto puede jugar en contra al momento de solicitar una hipoteca. Considera reducir las deducciones al mínimo durante los dos años previos a tu aplicación hipotecaria, para mostrar mayores ingresos netos en papel.
6. Busca apoyo especializado
Un asesor hipotecario que entienda la realidad de los trabajadores independientes puede ser un aliado estratégico. Existen programas de apoyo como el Homebuyer Grant de Chase, que ofrece hasta $5,000 en ayuda económica para reducir tasas de interés y cubrir costos de cierre.
Oportunidad: construir riqueza generacional
Más allá del desafío, comprar una vivienda siendo trabajador independiente es una puerta a la estabilidad financiera y a la creación de patrimonio familiar.
El crecimiento de los negocios latinos en EE. UU. no es una moda pasajera. Es una tendencia que, bien gestionada, puede ser la base para generar riqueza generacional y reducir la brecha económica que por años ha afectado a nuestras comunidades.
Como todo en la vida del emprendedor, requiere visión, estrategia y mucha preparación.
No es imposible, es cuestión de preparación
La compra de una vivienda para un trabajador independiente es un proceso diferente, pero no inaccesible. La clave está en conocer los requisitos, organizar tus finanzas y buscar asesoría especializada.
El éxito de muchos latinos emprendedores en Estados Unidos es la prueba de que, con disciplina, sí se puede.
Porque al final, trabajar para uno mismo no debería ser un obstáculo para construir el hogar que sueñas.