Juez Bloquea Temporalmente la Orden de Trump de Cancelar la Ciudadanía por Nacimiento
El jueves 23 de enero de 2025, un juez federal en Seattle emitió una orden de restricción temporal que bloquea la implementación del controvertido decreto ejecutivo del presidente Donald Trump para poner fin a la ciudadanía por nacimiento en Estados Unidos. Esta medida representa el primer obstáculo judicial significativo para la administración en su intento de alterar un derecho consagrado por la 14ª Enmienda de la Constitución.
Una Decisión Judicial Contundente
El juez federal John C. Coughenour, un veterano jurista nombrado por el presidente Ronald Reagan, describió el decreto como “flagrantemente inconstitucional” durante la audiencia celebrada en el tribunal. En palabras del magistrado: “En mis cuatro décadas en el banquillo, nunca he visto un caso con una violación tan clara de los principios constitucionales fundamentales”.
La orden de restricción temporal, que tiene un alcance nacional, estará vigente durante 14 días mientras el caso avanza en los tribunales. Este fallo también subraya la gravedad del asunto, ya que la decisión de Coughenour podría sentar las bases para una revisión judicial más amplia en los próximos meses.
Reacciones y Respuestas Legales
Celebración de la Decisión
El fiscal general del estado de Washington, Nick Brown, lideró una coalición de estados demandantes y celebró la decisión del juez, calificándola como “solo el comienzo de una larga batalla legal”. Brown enfatizó que proteger la ciudadanía por nacimiento no es solo una cuestión de derechos legales, sino también de principios morales.
Defensa de la Administración
Por su parte, el Departamento de Justicia prometió “defender vigorosamente” el decreto ejecutivo de Trump. Un portavoz declaró que la administración está preparada para apelar la decisión si es necesario, llevando el caso hasta la Corte Suprema, de ser preciso.
Próximos Pasos
En los próximos días, el juez Coughenour decidirá si emite una orden de restricción a largo plazo. En caso de apelación, el caso será evaluado por la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito, conocida por su tendencia a tomar posturas progresistas en temas de derechos civiles.
Contexto de las Demandas
El decreto ejecutivo ha generado una ola de litigios, con cinco demandas principales presentadas por una coalición de 22 estados y varias organizaciones de derechos civiles. Entre los demandantes destacan fiscales generales que son ciudadanos estadounidenses por derecho de nacimiento y mujeres embarazadas preocupadas por el futuro de sus hijos.
Un caso destacado es el del fiscal general de Connecticut, William Tong, el primer chinoamericano elegido para este cargo. Tong compartió su perspectiva personal, afirmando: “Para mí, esta batalla es profundamente personal. No hay un debate legal legítimo sobre esta cuestión. Pero el hecho de que Trump esté completamente equivocado no impedirá que inflija daño a familias como la mía”.
Implicaciones de la Orden Ejecutiva
El decreto ejecutivo de Trump, firmado el mismo día de su toma de posesión, buscaba entrar en vigor el 19 de febrero de 2025. De haberse implementado, podría haber afectado a cientos de miles de personas nacidas en Estados Unidos. Según datos citados en las demandas, en 2022 hubo aproximadamente 255,000 nacimientos de niños ciudadanos de madres que vivían ilegalmente en el país y cerca de 153,000 nacimientos de niños de padres en la misma situación.
Este intento de reinterpretar la 14ª Enmienda ha generado un intenso debate sobre el alcance de los derechos constitucionales y las implicaciones para las políticas de inmigración. Mientras los defensores del decreto argumentan que busca proteger la integridad del sistema migratorio, sus detractores lo consideran una medida xenófoba destinada a dividir a las comunidades.
Un Caso con Repercusiones Históricas
El fallo del juez Coughenour marca el inicio de un proceso judicial que podría convertirse en un hito en la historia legal de Estados Unidos. Además de definir el futuro de la ciudadanía por nacimiento, este caso podría influir en el panorama político y social del país durante los próximos años.
Por ahora, la orden de restricción temporal brinda un respiro a las familias inmigrantes preocupadas por el estatus de sus hijos nacidos o por nacer en Estados Unidos. Sin embargo, el camino hacia una resolución definitiva está lleno de incertidumbre y desafíos legales. Lo que está en juego no es solo una cuestión de política migratoria, sino también los valores fundamentales de inclusión y equidad que definen a la nación.